TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS DEL SUEÑO
Los trastornos del sueño son aquellos que afectan a nuestra capacidad para conciliar y mantener el sueño o para que éste sea reparador.
Dentro del grupo de los trastornos del sueño tenemos:
- Trastorno de insomnio.
- Trastorno de hipersomnia.
- Narcolepsia.
- Apnea e hipopnea obstructiva del sueño.
- Apnea central del sueño.
- Hipoventilación relacionada con el sueño.
- Trastornos del ritmo circadiano de sueño-vigilia.
- Trastornos del despertar del sueño no REM.
- Trastorno del comportamiento del sueño REM.
- Trastorno de pesadillas.
- Síndrome de piernas inquietas.
- Trastorno del sueño inducido por sustancias/medicamentos.
- Otros trastornos no especificados.
Como puede verse, la variedad de trastornos es muy alta. El dormir y su consecuencia, el descanso, es una actividad imprescindible para la vida humana. Si no gozamos de un sueño reparador AFECTARÁ A: nuestras capacidades cognitivas, a nuestro estado emocional, a nuestro cuerpo y a nuestras relaciones sociales.
La mayoría de estos trastornos se diagnostican formalmente con un periodo de presentación de síntomas de 3 meses, pero, sinceramente, ¿te imaginas estar 3 meses durmiendo mal para poder tratarte? MI RECOMENDACIÓN es que acudas a consulta lo antes posible si los síntomas se presentan durante al menos 1 mes. Si la patología tiene 3 meses de evolución tu estado general estará muy perjudicado y tus recursos, motivación y ánimo también. Con 1 mes de evolución tu estado estará mucho menos perjudicado por lo que el tratamiento podrá ser más breve y efectivo.
Los psicólogos asesoramos la idoneidad de consultar con un médico especialista si lo creemos oportuno, así como el uso de tratamiento farmacológico prescrito por el médico correspondiente.
¿Cuánto dura el tratamiento? Es una pregunta muy frecuente y de difícil respuesta. Las variables más importantes para la duración del tratamiento son: la causa, la gravedad, el tiempo de evolución y el paciente. La causa, la gravedad y el tiempo de evolución, en el momento de consulta ya son factores incontrolables y no se tiene poder para cambiarlo. Sin embargo, el modo de afrontamiento del paciente sí que es mejorable. Por tanto, si el paciente se involucra activamente en la terapia ésta se reduce sobremanera. Pero hay que tener en cuenta que si se viene a consulta 3 años después de empezar los síntomas no es lo mismo que si se viene después de 1 o 2 meses de haber comenzado. Como ya expliqué es mucho mejor venir a consulta al comienzo de los síntomas. Esto hará que la duración del tratamiento sea menor y, por tanto, su coste.
Tratamiento farmacológico, ¿SÍ O NO? No hay que ver a los fármacos como enemigos o como que se va a depender de ellos. Esto no significa que haya que acudir a los fármacos como primera solución, porque para ser sinceros NO CURAN LA CAUSA. ¿Esto significa que son malos? NO. De hecho, y siempre según el caso, son NECESARIOS. Pero NUNCA DEBEN SER NUESTRA PRIMERA OPCIÓN salvo que la sintomatología lo aconseje. La primera opción debe ser el tratamiento psicológico. Si acudimos en las fases iniciales de nuestras dificultades o problemas no vamos a tener que vernos obligados a tomar un tratamiento farmacológico. ¿Y qué pasa si mi sintomatología es grave o muy incapacitante? En este caso, y siempre bajo recomendación profesional sanitaria, sería recomendable una valoración por parte del psiquiatra de complementar la terapia psicológica con la terapia farmacológica. A esto se le llama un ABORDAJE MIXTO de la patología. Este tipo de abordajes han mostrado en todos los estudios científicos una mayor potencia que el abordaje farmacológico exclusivo para patologías graves o muy incapacitantes.
¿Por qué no tratarme entonces directamente con un psiquiatra? Piensa lo siguiente, un psicólogo estudia toda su carrera universitaria sobre cómo funciona la mente de las personas, la sociedad, la cultura, etc. Un médico psiquiatra da únicamente 1 asignatura de psiquiatría en su carrera y luego hace 4 años de residencia en un hospital en determinados servicios. Es obvio que para una patología muy grave, a la cuál ellos están muy acostumbrados a tratar, la elección es consultar al psiquiatra de urgencias. Sin embargo, hay muy pocos psiquiatras que ofrezcan un abordaje psicoterapéutico, ya que la gran mayoría sólo ofrecen un tratamiento farmacológico dejando cojo el tratamiento al no tratar la causa, sólo sus síntomas.
Sin embargo, cuando estamos determinando a qué especialista acudir es muy probable que no tengamos una patología muy grave, por lo que se recomienda acudir al psicólogo. Si la valoración del psicólogo es que la patología puede requerir ayuda del psiquiatra u otro profesional sin duda alguna se te recomendará.